EMT en AUTISMO. ¿PORQUÉ FUNCIONA?
El uso de la Estimulación cerebral magnética en el autismo sigue aún en investigación y ésta es muy promisoria. Las agencias regulatorias no lo han aprobado aún como un método terapéutico. Y sin embargo, no hay duda clínica ,para quienes la usamos clínicamente, de que la estimulación cerebral para niños y adolescentes o adultos con autismo, produce mejoría, y sin pretender curar una condición de neurodesarrollo atípico, porque regula las Mini columnas de la corteza cerebral y la falla inhibitoria de las células periféricas de la corteza cerebral, que produce un exceso de estímulos sin filtro, responsables de los síntomas característicos observables en el paciente autista.
En condiciones normales las células inhibitorias que rodean a las neuronas especializadas de la corteza cerebral en cada región, permiten eliminar los estímulos irrelevantes para centrar la función específica (símil de un sombrero mexicano normalmente) pero cuando no ocurre ésta poda inhibitoria y permanecen todos los estímulos perceptivos, emocionales o de pensamiento adquieren la misma relevancia y el resultado es una abrumadora entrada de estímulos sin filtro ( como un sombrero de copa en autismo).
La mejoría con estimulación cerebral magnética se correlaciona con el número de tratamientos. A más sesiones, mayor mejoría observable y aún la no observable, pero que por los estudios previos ya comprobados, se sabe que ocurre.
Se utilizan en el protocolo ondas de menos de 1 Hz para Inhibición bilateral en corteza prefrontal dorsolateral. El tiempo de aplicación depende de la edad y la hiperactividad del paciente.
Numerosos estudios experimentales muestran entre sus efectos benéficos :
Que produce Neuro Modulación de Ondas Gamma, que están implicadas en la producción de sx. de hiperatención en el autismo, cuando la rTMS es aplicada a la corteza prefrontal dorsolateral bilateral.
Mejora las funciones ejecutivas en forma variable en cada caso. La empatía y la comprensión de las emociones propias y del otro (células en espejo).
Mejora el comportamiento en términos de conductas aberrantes o repetitivas y las conductas sociales así como sostener el contacto de la mirada.
Se mejora el tiempo de actuar impulsivamente, mejora el tiempo de pensar antes de actuar. O de ejecutar las conductas repetitivas.
Normaliza los efectos de excitabilidad del Sistema Nervioso Autónomo. Como la frecuencia cardíaca. El insomnio, manifestaciones gastrointestinales y otras malas regulaciones del Sistema Nervioso Autónomo en el autismo, que se califican clínicamente como manifestaciones de ansiedad.